lunes, 12 de agosto de 2024

LA IGLESIA CATÓLICA Y LA EUTANASIA: INCURABLE NO ES INCUIDABLE

 


"La Iglesia nos invita a reflexionar sobre hasta qué punto la obstinación terapéutica no es una expresión de la medicina a favor de los enfermos", sentenció Paglia y descartó totalmente la posibilidad de la muerte asistida como una opción para la santa Sede.






sábado, 1 de junio de 2024

Mateo 18, 6 - Día Internacional del Niño - Los niños en Ucrania

 

Hoy, 1 de junio, es el Día internacional del Niño.

Hoy, 1 de junio, los niños en Ucrania ven vulnerados sus más fundamentales derechos.

550 niños ucranianos fueron asesinados por Rusia desde el 24 de febrero de 2022 cuando se inició la invasión a gran escala sobre Ucrania. Desde ese día, cada día, los niños en Ucrania sufren de los más diversos modos. Sufren heridas físicas. Sufren no poder conciliar el sueño. Sufren no poder ir a la escuela. Sufren no poder jugar libremente. Sufren la pérdida de seres queridos. Sufren agresiones a su integridad bio-psico-socio-religioso-cultural.

En Mateo 18, 6 el aviso es muy severo: “Pero si alguien escandaliza a uno de estos pequeños que creen en mí, sería preferible para él que le ataran al cuello una piedra de moler y lo hundieran en el fondo del mar.”

La suma del mal se expresa a pleno cuando se violan la dignidad y los derechos fundamentales de un niño. La invasión a gran escala de Rusia sobre Ucrania concentra la suma de todos los males posibles y provoca deliberadamente daño a los niños ucranianos.

Los niños en ninguna parte del mundo deben vivir aterrados. Ningún niño debe vivir angustiado. Ningún niño debe ser agredido. Los niños no deben ser secuestrados ni maltratados. Nadie debe apropiarse de la vida de un niño. Se debe exigir a Rusia que deje de violar la dignidad, la vida y la integridad de los niños ucraniano. 

“El abuso, en cualquiera de sus formas, es inaceptable. (…) El testimonio de los supervivientes representa una herida abierta (…)”[1] y exige sanción perpetua y el más alto reproche a quien, como individuo o como Estado, aterrorice, lastime o le quite la vida a un niño. Rusia merece sanción perpetua y el más alto reproche por violar los derechos humanos fundamentales de los niños en Ucrania.

Exigir el respeto de la dignidad y los derechos fundamentales de los niños en Ucrania y en todo el mundo es estar al servicio de la paz. Una paz justa y verdadera.

“(…) Para servir verdaderamente a la paz, la libertad de cada ser humano y de cada comunidad humana debe respetar las libertades y los derechos de los demás, individuales o colectivos. (…)”[2] Rusia no lo hace.

“(…) Para respetar la libertad, hay que contribuir también a la codificación progresiva de las aplicaciones que emanan de la Declaración universal de los Derechos del hombre. (…)”[3] Rusia no sabe decodificarla.

Los niños ucranianos y todos los niños merecen nuestros mayores esfuerzos por un orden mundial respetuoso de la vida y de la dignidad de cada persona desde el primer instante de su existencia y en cada instancia de su vida.

Que el próximo 1 de junio nos encuentre celebrando la vida y la dignidad de cada niño y celebrando que los niños en Ucrania están libres de invasores rusos.

Que el próximo 1 de junio los Derechos Humanos sean respetados en Ucrania y en cada parte del mundo.

Ojalá no sea solo un deseo. Dios quiera concedernos esta bendición.


Roxana E. Stasiow

#StandWithUkraine

domingo, 19 de mayo de 2024

La invasión a gran escala de Rusia sobre Ucrania y la dignidad de los niños a la luz de la DECLARACIÓN DEL DICASTERIO PARA LA DOCTRINA DE LA FE “DIGNITAS INFINITA SOBRE LA DIGNIDAD HUMANA”[i]

 

[i]

Están en Argentina Daria Herasymchuk y dos chicos ucranianos que fueron prisioneros de los rusos que invaden Ucrania. Nada de lo que pueda escribir es algo lindo. No hay palabras amables para describir lo que vivieron esos chicos y que van a recordar por el resto de sus vidas.

La invasión rusa a gran escala sobre Ucrania es una violación permanente de los Derechos Humanos de todos y, especialmente, de los niños y adolescentes.

Rusia se lleva por delante todos los Tratados Internacionales de Derechos Humanos.

Hoy es Ucrania, mañana quién sabe.

Compartir esto que escribo es apenas intentar que las voces de esos niños y adolescentes se escuchen (en INFANCIA SECUESTRADA | El proyecto documental @online.ua (youtube.com) pueden oírlas -porque quienes hicieron el documental tuvieron el gesto de subtitular lo que dicen sin superponer la voz de quien traduce-).

Seguramente pueda hacer mucho más que sólo hablarles de esto. Pero es algo. Poco. Pero algo.

Buscando explicación, o quizás buscando encontrar consuelo, ante tan dolorosos testimonios retomé la lectura de “Dignitas Infinita” porque se ocupa de “(…) temáticas estrechamente relacionadas con el tema de la dignidad (…)” prestando “(…) mayor atención a las graves violaciones de la dignidad humana que se producen actualmente en nuestro tiempo (…)”.

La dignidad es la misma esencia de la persona humana. Es aquello que nos permite reconocernos a nosotros mismos en el prójimo. La dignidad de cada persona humana y de todos nosotros es “(…) inmensa e inalienable (…)”. Sin embargo, y aunque los Tratados Internacionales de Derechos Humanos la reconocen como algo intrínseco y propio de cada miembro de la familia humana, no todos la respetan. “(…) La denuncia de estas graves y actuales violaciones de la dignidad humana es un gesto necesario (…)”.

Esta “(…) dignidad existe “más allá de toda circunstancia” (…) [es] una verdad universal, que todos estamos llamados a reconocer, como condición fundamental para que nuestras sociedades sean verdaderamente justas, pacíficas, sanas y, en definitiva, auténticamente humanas.”

La invasión a gran escala de Rusia sobre Ucrania nos interpela. Nuestra acción o inacción tendrá impacto en la Historia. Seremos quienes decidimos proteger la vida y la dignidad de todos y cada uno o seremos quienes confundimos el bien con la conveniencia y la verdad con el consenso. Seremos quienes buscamos el bien de todos y cada uno con prudencia o seremos quienes nublemos nuestra conciencia para justificar lo injustificable.

“(…) (Dignitas Infinita) Una dignidad infinita, que se fundamenta inalienablemente en su propio ser, le corresponde a cada persona humana, más allá de toda circunstancia y en cualquier estado o situación en que se encuentre. Este principio, plenamente reconocible incluso por la sola razón, fundamenta la primacía de la persona humana y la protección de sus derechos. (…)” Ningún jefe de Estado puede negar estas razones objetivas. Rusia tampoco.

Esta “(…) dignidad inmensa representa un dato originario a reconocer con lealtad y a acoger con gratitud. Es precisamente en ese reconocimiento y aceptación donde puede fundarse una nueva convivencia entre los seres humanos (…)”. Quien no la reconoce y acepta es capaz de los más horrendos crímenes y de alterar la paz mundial.

Dice el Papa Francisco: “(…) <<el ser humano tiene la misma dignidad inviolable en cualquier época de la historia y nadie puede sentirse autorizado por las circunstancias a negar esta convicción o a no obrar en consecuencia>>. (…)” Nadie, porque quien obra avasallando la dignidad de otra persona “(…) se comporta de un modo que “no es digno” de su naturaleza (…). Pero esta posibilidad existe. (…)” Ejemplo de ello, es el secuestro de los niños ucranianos por parte de los rusos invasores. Secuestro, sí. Porque las personas de buena voluntad no somos ingenuas ni estúpidas. Secuestro, sí. Porque las personas de buena voluntad sabemos reconocer argumentos falsos. Secuestro, sí. Porque las personas de buena voluntad reconocemos que la intención rusa no es proteger ni socorrer a los niños. Si así fuera, no hubieran bombardeado hospitales materno-infantiles o el edificio de un teatro donde claramente se anunciaba con letras grandes que allí había niños. “(…) Cuando esto sucede, nos encontramos ante personas que parecen haber perdido todo rastro de dignidad. (…) [y] la capacidad, inherente a la propia naturaleza humana, de asumir obligaciones hacia los otros.”

“(…) Hay que reconocer que se opone a la dignidad humana <<cuanto atenta contra la vida (…)>>. Atenta además contra nuestra dignidad <<cuanto viola la integridad de la persona humana, como, por ejemplo, las mutilaciones, las torturas morales o físicas, los conatos sistemáticos para dominar la mente ajena>>. Y finalmente <<cuanto ofende a la dignidad humana, como son las condiciones infrahumanas de vida, las detenciones arbitrarias, las deportaciones (…)>>”. Todo esto lo vivieron y lo viven los niños y adolescentes ucranianos secuestrados por los invasores rusos. Hay testimonios. Hay pruebas de ello.

La invasión a gran escala de Rusia sobre Ucrania “(…) niega la dignidad humana (…) [,] atenta contra la dignidad humana a corto y largo plazo (…). Ninguna guerra vale las lágrimas de una madre que ha visto a su hijo mutilado o muerto (…); y ninguna guerra vale la desesperación de los que están obligados a dejar su patria y son privados, de un momento a otro, de su casa y de todos sus vínculos familiares, de amistad, sociales y culturales que se han construido, a veces a través de generaciones (…)”.

“(…) La profunda dignidad inherente al ser humano en su totalidad de mente y cuerpo nos permite comprender también por qué todo abuso sexual deja profundas cicatrices en el corazón de quienes lo sufren: éstos están, de hecho, heridos en su dignidad humana. (…)” Qué decir cuando hay evidencias que los invasores rusos violaron a un niño de apenas 4 años.

Qué más se puede decir.





   







viernes, 22 de marzo de 2024

Coincidencias entre derecho constitucional y bioética

 

Un placer haber participado y redescubrir positivas coincidencias entre el derecho constitucional y la bioética. Porque una sociedad global más amable sólo es posible si los valores fundamentales se vuelven praxis respetuosa y cotidiana.

Y traer el pensamiento de Polibio a la actualidad: una genialidad de Parra Gómez!!! Porque es cierto: el gobierno de uno solo, si degenera, se vuelve tiranía.

Y la democracia o gobierno de muchos, si degenera, se transforma en oclocracia. Por eso, como decía Tarás Shevchenko: Учітеся. Leamos las Constituciones para encontrar valores compartidos y, sobre ellos... construir un futuro donde la prudencia y la concordia garanticen la amistad entre las personas y entre los países.


sábado, 24 de febrero de 2024

Los principios bioéticos de Sgreccia y la invasión en Ucrania

2022 - 24 de febrero - 2024

DEFENSA DE LA VIDA FÍSICA
Las personas en Ucrania defienden su vida de la inhumanidad criminal del invasor ruso.               

LIBERTAD/RESPONSABILIDAD
Las personas en Ucrania defienden responsablemente su libertad del cruel avasallamiento del invasor ruso. 

TOTALIDAD
Las personas en Ucrania defienden su integridad social, cultural y territorial de la acción sistemática del perpetrador rusa.

SOCIABILIDAD/SUBSIDIARIEDAD
Con solidaridad individual, apelan a la sociabilidad, subsidiariedad y ayuda humanitaria internacional para que todas juntas, las personas de bien, defendamos los valores universales.                   


 #24Feb2024                                                                                                                                 

 #StandWithUkraine

💙💛

Nota de Redacción: Las personas en Ucrania, día a día y a causa de la invasión injustificada de rusia, ven avasallados sus derechos humanos fundamentales y presencian la violación sistemática de los tratados internacionales.

jueves, 8 de febrero de 2024

BIOÉTICA en el CINE: MAVKA, GUARDIANA DEL BOSQUE

MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE es una bellísima película de origen ucraniano apta para todo público dirigida por Oleh Malamuzh y Oleksandra Ruban basada en "La canción del bosque" de Lesya Ukrainka.

MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE, a partir de resaltar los valores universales, destaca la importancia de la biodiversidad y el fundamental significado de la naturaleza esencial de todos los vivientes.

En MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE, la esencia/naturaleza, la cultura, los sentimientos, los vínculos y la mitología nos invitan a reflexionar sobre cada una de las decisiones que tomamos como individuos y como comunidad sobre la vida, sobre la salud y sobre los recursos que nos brinda el planeta.

MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE, sin ser inmune a la ira frente a la agresión injusta, con su esencial bondad y su generosa entrega resuelve el conflicto entre los miembros de los ecosistemas.

MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE, es una bella historia de amor que, en medio de preciosas melodías y tradiciones, nos propone una mirada bioética esperanzada.

Agradecida por la invitación, fue para mí un gran honor y un verdadero deleite estar presente en la Avant Premier de MAVKA: GUARDIANA DEL BOSQUE el 07/02/24 en Buenos Aires, Argentina. Y es un inmenso placer recomendar la película como una invitación a reflexionar sobre los valores fundamentales y sobre la realidad bioética que nos interpela.

Más info en: mavka.ua; Embajada de Ucrania en la Argentina; @MagnificoFilms; Cinemark Hoyts; Showcase, Cinépolis, Cinemacenter, Atlas, Multiplex.


viernes, 8 de diciembre de 2023

Matar intencionalmente de hambre a las personas siempre está mal

Holodomor = Genocidio = Crimen de lesa humanidad

A continuación comparto el texto de la petición que realizara a parte del arco político de la República Argentina con funciones ejecutivas y legislativas nacionales a partir del 10 de diciembre de 2023:



Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 08 de diciembre de 2023.

Objeto: Reconocer el Holodomor como Genocidio.

 

 

Sra./Sr. ........................................

.....................................................

 

De mi más alta consideración:

 

              Soy argentina, nieta de ucranianos, y apelo a su humana sensibilidad peticionándole respetuosamente que, en la medida de sus posibilidades tenga a bien promover una ley que reconozca el Holodomor que sufrieron millones de personas en Ucrania como genocidio.

              El Holodomor, que califica como crimen de lesa humanidad, fue una acción genocida deliberadamente ejecutada por el régimen soviético durante los años 1932-1933 con la clara intención de matar de hambre a millones de ucranianos y así intentar exterminar su identidad nacional.

              Se acaban de cumplir 90 años del dato histórico pero la tragedia humana continúa reclamando solidario reconocimiento y respetuoso homenaje para cada una de las víctimas.

              La esencia de la Constitución de la Nación Argentina, al otorgar jerarquía superior a los Tratados, Concordatos y Convenciones Internacionales sobre Derechos Humanos busca otorgar garantía de protección a los derechos personalísimos inalienables y esenciales. Por eso, entre otras cuestiones, manda abolir toda forma de tormento y reconocer el derecho fundamental de cada persona humana y de todos los miembros de la familia humana a estar protegidos contra el hambre sin distinciones de ninguna índole.

              Los millones de víctimas del Holodomor en Ucrania en los años 1932-1933 sufrieron, en todos sus gradientes posibles, la tragedia de la inanición deliberadamente provocada y padecieron el más brutal y cruel ultraje de al menos dos de sus más esenciales derechos: el derecho a la vida y el derecho a la alimentación.

              La intención deliberada de matar de hambre a una o a millones de personas constituye uno de los tormentos más aberrantes e inhumanos que se conocen. Es deshonesto ser indiferente a ello. La pasividad ante tan espeluznante horror es inmoral.

Por el contrario, hacer manifiesto el enérgico reproche sobre lo acontecido en el pasado no sólo hace concreta la expresión de sentidas y solidarias condolencias por cada una de esas víctimas inocentes; sino que, por un lado sensibiliza para evitar en el presente atrocidades inhumanas similares (no es casual que la actual Fórmula de Paz del Presidente Volodímir O. Zelensky incluya entre sus 10 puntos una referido específicamente a la seguridad alimentaria); y, por otro, permite afianzar un futuro con un orden internacional que haga plenamente efectivo el respeto incondicional de la dignidad personal y los derechos fundamentales de cada ser humano sin discriminaciones de ningún tipo.

La hambruna deliberadamente provocada es un acto de genocidio.

El genocidio por hambre es un flagelo tremendo que provoca a quienes lo padecen graves e inhumanos sufrimientos que culminan con la misma muerte por inanición.

Las víctimas del Holodomor en Ucrania nos reclaman desde 1932-1933 un presente de acciones positivas que condenen con vehemencia las atrocidades que sufrieron.

Por ellos y por sus descendientes, le reitero mi pedido respetuoso de promover su amparo retrospectivo mediante una providencia que reconozca el Holodomor de 1932-1933 como Genocidio del Pueblo Ucraniano para así remediar el pasado y evitar en el presente y en el futuro acto inhumanos similares.

 

Esperando una resolución favorable para mi petición, saludo a usted muy atentamente,

                                Roxana Elena Stasiow