sábado, 7 de febrero de 2009

Eutanasia

Italia / El caso de la joven en estado vegetativoBerlusconi busca frenar la muerte de Eluana y crece la controversia

El gobierno preparó un decreto ley para impedir que se cumpla la sentencia judicial

lanacion.com | Exterior | Viernes 6 de febrero de 2009


Los médicos suspendieron totalmente la alimentación a Eluana Englaro

Los profesionales de la clínica La Quiete decidieron adelantar la desconexión definitiva de la joven italiana, en coma desde hace 17 años; el Papa volvió a reivindicar "el valor y la dignidad" de la vida humana

lanacion.com | Exterior | S?do 7 de febrero de 2009

Italia / El caso de la joven en estado vegetativoEl drama de Eluana lleva a Italia a una crisis institucional

Berlusconi desafía al presidente Napolitano y al máximo tribunal con un decreto

lanacion.com | Exterior | S?do 7 de febrero de 2009


En la Argentina no hay legislación sobre el "derecho a la muerte digna"

Aunque la eutanasia está penada, existe un vacío que permite interpretar si casos como el de Eluana son punibles o no; especialistas consultados por

lanacion.com | Exterior | Viernes 6 de febrero de 2009


Eutanasia: Napolitano rechazó el decreto de Berlusconi para frenar la desconexión de Eluana

El presidente italiano no aprobó la resolución adoptada por el Consejo de Ministros, que impedía dejar morir a la joven en estado vegetativo; los médicos continúan con el proceso; crece la polémica

lanacion.com | Exterior | Viernes 6 de febrero de 2009


El escenarioUna decisión de matiz político

Elisabetta Piqué

lanacion.com | Exterior | S?do 7 de febrero de 2009


El caso de la joven en estado vegetativoDejaron de alimentar a Eluana

Anoche, los médicos que la atienden suspendieron su nutrición artificial; Berlusconi aún intenta revertir la medida

lanacion.com | Exterior | Domingo 8 de febrero de 2009


Crece la controversia en ItaliaNueva estrategia de Berlusconi por el caso Eluana

Puso en la mira a la clínica La Quiete, donde se encuentra la joven en estado vegetativo

lanacion.com | Exterior | Lunes 9 de febrero de 2009


Excomulgarán a los que apoyen la muerte de Eluana

Así lo declaró el secretario de la Congregación vaticana para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, monseñor Albert Malcolm Ranjith; la medida alcanzaría a políticos, médicos, legisladores y familiares de la enferma

lanacion.com | Cultura | Lunes 9 de febrero de 2009


En la Argentina no hay legislación sobre el "derecho a la muerte digna"

Aunque la eutanasia está penada, existe un vacío que permite interpretar si casos como el de Eluana son punibles o no; especialistas consultados por

lanacion.com | Exterior | Lunes 9 de febrero de 2009



Eutanasia: Berlusconi redobla los esfuerzos para salvar a Eluana

El Senado italiano inició un debate para aprobar el proyecto de ley que impide la desconexión de la joven; si se aprueba, pasará mañana a la Cámara de Diputados

lanacion.com | Exterior | Lunes 9 de febrero de 2009



Tras suspender la alimentación a Eluana, continúa en Italia la polémica por la eutanasia

En su primera referencia oficial sobre el caso de la mujer italiana que lleva 17 años en coma, el Vaticano manifestó su "aprecio" por el proyecto de ley para impedir su muerte, impulsado por Berlusconi; el padre aseguró que con sus reclamos no hizo "más que darle voz" a su hija

lanacion.com | Exterior | Domingo 8 de febrero de 2009



Polémica en ItaliaLlegó a su fin la agonía de Eluana

Murió ayer, tras pasar 17 años en coma

lanacion.com | Exterior | Martes 10 de febrero de 2009




La lucha y el dolor de Beppino Englaro
lanacion.com | Exterior | Martes 10 de febrero de 2009





La carrera para salvarla fue inútil: Eluana ha muerto

Roma (Italia), 10 Feb. 09 (AICA)


La mujer fallecida por decisión de la Justicia

Eluana, la joven protagonista del debate sobre su desconexión o no, que llevaba 17 años en coma, murió ayer mientras el Senado italiano estaba reunido para debatir la “ddl”, el proyecto de ley para evitar su muerte, redactado antes de que se le suspendiera la alimentación. Tras conocer la noticia todos los senadores se pusieron de pie y guardaron un minuto de silencio. Fue el anestesista quien informó al padre de Eluana la trágica noticia, quien declaró: "No quiero decir nada". El neurólogo que sigue su caso desde hace años, Carlo Alberto Defanti, explicó ayer que Eluana sufrió una crisis imprevista, "algo -dijo- que no predecíamos". El cardenal Lozano Barragán pidió que "el Señor la reciba en su seno y perdone a quien se la ha llevado de este mundo".

Tras conocer la noticia, la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) emitió un comunicado en el que hace un llamamiento para que “no decaiga esta pasión por la vida humana, desde su concepción hasta su fin natural”. Para los obispos italianos, “son momentos de grandísimo dolor” pero, añadían: “Estamos abatidos por esta grave circunstancia pero tenemos esperanza, que nace de la fe y se entrega a la misericordia del Padre, al cuerpo y alma de Eluana”. “Las oraciones y los llamamientos de tantos hombres de buena voluntad no han sido suficientes para preservar su frágil existencia, necesitada de amorosa cura”.

El portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi, pidió que tras este trágico hecho, la sociedad reflexione. "Ahora que Eluana está en paz deseamos que su caso, luego de tantas discusiones, sea motivo de reflexión para todos y de búsqueda responsable de las mejores vías para acompañar en el deber del respeto a la vida, en el amor y en la asistencia a las personas más débiles". Para el padre Lombardi "la muerte de Eluana no puede dejarnos una sombra de tristeza por las circunstancias en las que ha fallecido".

El presidente del Consejo Pontifico para la Pastoral de la Salud, cardenal Javier Lozano Barragán, pidió, igualmente, que "el Señor la reciba en su seno y perdone a quien se la ha llevado de este mundo" y advirtió que "si la intervención humana fue decisiva para la muerte de Eluana, continuaré pensando que es un delito". Por su parte, el cardenal Saraiva Martin, prefecto emérito de la Congregación para las Causas de los Santos y miembro del Consejo Pontificio para la Pastoral de la Salud, aseguró: “Ha sido un asesinato”.

En el momento del debate, el presidente del Senado, Renato Schifani, fue informado de la muerte de Eluana y tras conocer la noticia, todos los senadores se pusieron de pie y guardaron un minuto de silencio. Después Schifani expresó su solidaridad y cercanía con el padre, Giuseppe Englaro, y dijo que "este es un momento de reflexión en el que todos, comenzando por los políticos, debemos reflexionar sobre el derecho de la vida y la muerte".

Por su parte, el senador Maurizio Gasparri lo calificó de "un claro caso de eutanasia no previsto por ninguna ley" y añadió que "hará falta conocer qué ha sucedido en aquel lugar que se llama Quiete y que debería llamarse la muerte" pero fue, precisamente, el vicepresidente del grupo conservador en el Senado, Caetano Quagriello, quien avivó el debate al tomar el micrófono y declarar que "Eluana no ha muerto, sino que ha sido asesinada".

El senador Fabrizio Cicchitto, lamentó la evidencia de “esta obra, típica de la cultura de la muerte". "No hablamos de laicismo. Por desgracia se trata de algo mucho peor". Las declaraciones desencadenaron un enfrentamiento entre gobierno y oposición llegando incluso a llamarlos asesinos. Algunos senadores abandonaron el recinto.

Poco después parecía que llegaba la calma, pero la sesión se suspendió.

Hablan los políticos
El ministro de Sanidad, Maurizo Sacconi, tras expresar su solidaridad con el padre de la joven instó al Senado a que apruebe el proyecto de ley "para que el sacrificio de Eluana no sea inútil" y el primer ministro Silvio Berlusconi mostró su profundo pesar por la muerte de Eluana y lamentó que la acción del Gobierno no haya sido suficiente para salvarle la vida.

El presidente de la República, Giorgio Napolitano, dijo que "tras un largo y trágico caso, el silencio que un natural respeto humano exige por parte de todos, deja espacio sólo a un sentimiento de profundo acompañamiento en el dolor de los familiares y de quienes han estado cercanos a la pobre Eluana".

La Ddl
Coincidiendo con el tercer día de suspensión de la alimentación e hidratación de Eluana Englaro, los grupos del Senado se reunieron ayer para debatir durante toda la noche las más de mil quinientas enmiendas presentadas al proyecto de ley. "A la espera de la aprobación de una completa y orgánica disciplina legislativa en materia de fin de vida –dice el texto del ddl- la alimentación y la hidratación, en cuanto a formas de sostenimiento vital y fisiológico para aliviar el sufrimiento, no pueden ser, en ningún caso, suspendidas por quien asiste a sujetos que no son capaces de valerse por sí mismos”. Todo fue inútil. Eluana falleció a las 20.10.

Reacciones antes del fallecimiento de Eluana
Cabe destacar que el secretario de la Congregación para el Culto Divino, el arzobispo ceilandés Albert Malcolm Ranjith, afirmó que todos los que intervinieron "en la muerte" de la joven están "de hecho" excomulgados. En declaraciones al diario católico por internet "Papanews.it. Petrus", anunció una iniciativa de su dicasterio "para clarificar definitivamente la imposibilidad de los católicos de acercarse a comulgar si forman parte activa, en varios niveles, en casos de eutanasia". "No se puede dar el cuerpo de Cristo a quien está a favor de la cultura de la muerte. Yo, el primero, no administraría la Eucaristía a ninguna persona implicada en esta tristísima historia", afirmó el prelado.

Defendiendo también la vida desde su concepción hasta su ocaso natural, se manifestó ayer el secretario de la Conferencia Episcopal Italiana, monseñor Mariano Crociata, quien afirmó que “vivimos un momento doloroso” con todo el ‘caso Eluana’. Según dijo, estos días con el debate que se suscitó en torno al tema “se aprecia una maduración de la conciencia colectiva y esto es en lo que se tiene que insistir porque hay razones que nos llevan a promover el valor de la vida y todo aquello que eso significa”.

Comunicado de la Conferencia Episcopal Italiana
"En estos momentos de grandísimo dolor, confiamos a Eluana Englaro a Dios. Las oraciones y los llamamientos de tantos hombres de buena voluntad no han sido suficientes para preservar su frágil existencia, necesitada de amorosa cura. Estamos abatidos por esta grave circunstancia pero tenemos esperanza, que nace de la fe y se entrega a la misericordia del Padre, al cuerpo y alma de Eluana. Y esta esperanza lleva a una sola cosa, a unir a cuantos creen en la dignidad de la persona y en el valor indisponible de la vida, sobre todo, cuando está indefensa. Hacemos un llamamiento a todos para que no decaiga esta pasión por la vida humana, desde su concepción hasta su fin natural”.+



AICA - Toda la información puede ser reproducida parcial o totalmente, citando la fuente



La vida humana es bella y digna aun débil y sufriente

Ciudad del Vaticano, 10 Feb. 09 (AICA)


El valor de la vida en todo momento

En su mensaje por la XVII Jornada Mundial del Enfermo que se celebra todos los años el 11 de febrero, fiesta de la Virgen de Lourdes (*), el papa Benedicto XVI resaltó "la absoluta y suprema dignidad de toda vida humana. No cambia, con el paso del tiempo, la enseñanza que la Iglesia incesantemente proclama: la vida humana es bella y vivida en plenitud incluso cuando es débil y está envuelta en el misterio del sufrimiento".

Este año, dice el Santo Padre, “nuestra atención se dirige especialmente a los niños y entre ellos a los enfermos y a los que sufren. Hay pequeños seres humanos que llevan en el cuerpo las secuelas de enfermedades que invalidan y otros que luchan contra males todavía incurables a pesar del progreso de la medicina".

"Hay niños heridos en el cuerpo y en el alma por los conflictos y las guerras, y otros víctimas inocentes del odio de insensatos adultos. Hay ‘chicos de la calle’, privados del calor de una familia y abandonados a sí mismos y menores profanados por gente abyecta que viola su inocencia, causándoles una herida psicológica que los marcará para el resto de la vida. No podemos olvidar el número incalculable de niños que mueren de sed, de hambre, por ausencia de asistencia sanitaria, ni tampoco a los pequeños refugiados y prófugos que dejan junto con sus padres sus tierras buscando condiciones de vida mejores. De todos estos niños se eleva un silencioso grito de dolor que interpela nuestra conciencia de seres humanos y de creyentes".

"La comunidad cristiana, que no puede ser indiferente ante situaciones tan dramáticas -prosigue el texto-, advierte la necesidad imperiosa de intervenir y ofrecerse como familia para los niños enfermos, a ejemplo del Buen Samaritano que ayuda al prójimo herido, Benedicto XVI explica que la compasión del Señor Jesús "por el llanto de la viuda de Nain y la implorante oración de Jairo constituyen, entre otros, algunos útiles puntos de referencia para aprender a compartir los momentos de pena física y moral de tantas familias probadas".

“Espero, por tanto, que la Jornada Mundial del Enfermo brinde también la oportunidad a las comunidades parroquiales y diocesanas de ser cada vez más conscientes de que son "familia de Dios" y las lleve a hacer perceptible el amor del Señor, que pide que precisamente en la Iglesia misma como familia, ninguno de sus miembros sufra por encontrarse en necesidad".

Benedicto XVI observa a continuación que "ya que el niño enfermo forma parte de una familia que comparte sus sufrimientos, a menudo con graves inconvenientes y dificultades, las comunidades cristianas no pueden dejar de hacerse cargo de ayudar a los núcleos familiares afectados por la enfermedad de un hijo o una hija. Es necesario acompañar a las personas sometidas a pruebas tan duras y ofrecerles la ayuda de una solidaridad concreta".

"Todo esto –dice luego el Papa– presupone un amor desinteresado y generoso, reflejo del amor misericordioso de Dios, que nunca abandona a sus hijos en la prueba, pero siempre proporciona adecuados recursos de corazón e inteligencia para estar en capacidad de afrontar apropiadamente las dificultades de la vida".

Tras señalar que “la dedicación y el compromiso constantes en servicio de los niños enfermos son un testimonio elocuente del amor por la vida humana, en particular por la vida de los que son del todo débiles y dependen absolutamente de los demás”, el Santo Padre asegura que "es a Jesús hacia quien debemos volver la mirada: muriendo en la cruz ha querido compartir el dolor de toda la humanidad. En su sufrir por amor vemos una suprema co-participación en las penas de los pequeños enfermos y de sus padres".

“Es necesario -dice el Papa- afirmar con fuerza la dignidad suprema y absoluta de toda vida humana. Con el pasar del tiempo no cambia la enseñanza que la Iglesia proclama incesantemente: la vida humana es bella y hay que vivirla con plenitud también cuando es débil y está envuelta en el misterio del sufrimiento".

"Juan Pablo II, que nos ofreció un ejemplo luminoso de aceptación paciente del sufrimiento, sobre todo en el ocaso de su vida, decía: "En la cruz está el Redentor del hombre, el Varón de dolores, que asumió en sí mismo los sufrimientos físicos y morales de los hombres de todos los tiempos, para que en el amor puedan encontrar el sentido salvífico de su dolor y las respuestas válidas a todas sus preguntas".

Por último, Benedicto XVI manifiesta su "aprecio y aliento a las organizaciones nacionales e internacionales que se ocupan de los niños enfermos, sobre todo en los países pobres, con generosidad y abnegación", y a todos cuantos "se dedican con amor a curar y aliviar los sufrimientos de los enfermos".

"Un saludo muy especial -concluye el Santo Padre- para ustedes, queridos niños enfermos y sufrientes: el Papa los abraza con afecto paterno junto a sus padres y familiares y les asegura un recuerdo especial en la oración, invitándolos a confiar en la ayuda materna de la Inmaculada Virgen María".

Texto completo
La Jornada Mundial del Enfermo, que se celebra el próximo 11 de febrero, memoria litúrgica de la Beata María Virgen de Lourdes, verá a las comunidades diocesanas reunirse con sus propios obispos en momentos de oración para reflexionar y decidir iniciativas de sensibilización sobre la realidad del sufrimiento. El Año Paulino, que estamos celebrando, ofrece la ocasión propicia para detenernos a meditar con el apóstol Pablo sobre el hecho de que, “así como abundan en nosotros los sufrimientos de Cristo, igualmente abunda también por Cristo nuestra consolación” (2 Cor 1,5). La unión espiritual con Lourdes nos trae además a la mente la maternal solicitud de la Madre de Jesús por los hermanos de su Hijo “aún peregrinos y puestos en medio de peligros y afanes, hasta que no seamos conducidos a la patria bendita” (Lumen gentium, 62).

Este año nuestra atención se dirige particularmente a los niños, las criaturas más débiles e indefensas y, entre estos, a los niños enfermos y sufrientes. Hay pequeños seres humanos que llevan en su cuerpo las consecuencias de enfermedades invalidantes, y otros que luchan con males hoy aún incurables a pesar del progreso de la medicina y la asistencia de buenos investigadores y profesionales de la salud. Hay niños heridos en su cuerpo y en su alma cono consecuencia de conflictos y guerras, y otros víctimas del odio de personas adultas insensatas. Hay “niños de la calle”, privados del calor de una familia y abandonados a sí mismos, y de menores profanados por gente abyecta que viola su inocencia, provocando en ellos una herida psicológica que les marcará para el resto de sus vidas. No podemos tampoco olvidar el incalculable número de menores que mueren a causa de la sed, del hambre, de la carencia de asistencia sanitaria, como también los pequeños exiliados y prófugos de su propia tierra con sus padres en búsqueda de mejores condiciones de vida. De todos estos niños se eleva un silencioso grito de dolor que interpela a nuestra conciencia de hombres y de creyentes.

La comunidad cristiana, que no puede permanecer indiferente ante tan dramáticas situaciones, advierte el imperioso deber de intervenir. La Iglesia, de hecho, como he escrito en la encíclica Deus caritas est, “es la familia de Dios en el mundo. En esta familia no debe haber nadie que sufra por falta de lo necesario” (25, b). Auguro por tanto, que también la Jornada Mundial del Enfermo ofrezca la oportunidad a las comunidades parroquiales y diocesanas de tomar cada vez más conciencia de ser “familia de Dios”, y las anime a hacer perceptible en los pueblos, en los barrios y en las ciudades el amor del Señor, que pide “que en la misma Iglesia, en cuanto familia, ningún miembro sufra porque pasa necesidad” (ibid.). El testimonio de la caridad formar parte de la vida misma de cada comunidad cristiana. Y desde el principio la Iglesia ha traducido en gestos concretos los principios evangélicos, como leemos en los Hechos de los Apóstoles. Hoy, dadas las nuevas situaciones de la asistencia sanitaria, se advierte la necesidad de una más estrecha colaboración entre los profesionales de la salud que trabajan en las distintas instituciones sanitarias y las comunidades eclesiales presentes en su territorio. En esta perspectiva se confirma en todo su valor una institución relacionada con la Santa Sede, como es el Hospital Pediátrico Niño Jesús, que celebra este año sus 140 años de vida.

Pero hay más. Dado que el niño enfermo pertenece a una familia que comparte su sufrimiento a menudo con graves impedimentos y dificultades, las comunidades cristianas no pueden dejar de hacerse cargo también de ayudar a los núcleos familiares afectados por la enfermedad de un hio o de una hija. A ejemplo del “Buen Samaritano” es necesario que se incline hacia las personas tan duramente probadas y les ofrezca el apoyo de una solidaridad concreta. De este modo, la aceptación y el compartir del sufrimiento se traduce en un apoyo útil a las familias de los niños enfermos, creando dentro de ellas un clima de serenidad y esperanza, y haciendo sentir a su alrededor una familia más vasta de hermanos y hermanas en Cristo. La compasión de Jesús por el llanto de la viuda de Naím (cfr Lc 7,12-17) y por la implorante súplica de Jairo (cfr Lc 8,41-56) constituyen, entre otros, algunos puntos de referencia para aprender a compartir los momentos de pena física y moral de tantas familias probadas. Todo esto presupone un amor desinteresado y generoso, reflejo y signo del amor misericordioso de Dios, que nunca abandona a sus hijos en la prueba, sino que siempre les proporciona admirables recursos de corazón y de inteligencia para ser capaces de afrontar adecuadamente las dificultades de la vida.

La dedicación cotidiana y el compromiso sin descanso al servicio de los niños enfermos constituyen un elocuente testimonio de amor por la vida humana, en particular por la vida de quien es débil y en todo y por todo dependiente de los demás. Es necesario afirmar con vigor la absoluta y suprema dignidad de toda vida humana. No cambia, con el transcurso del tiempo, la enseñanza que la Iglesia proclama incesantemente: la vida humana es bella y debe vivirse en plenitud también cuando es débil y está envuelta en el misterio del sufrimiento. Es a Jesús crucificado a quien debemos dirigir nuestra mirada: muriendo en la cruz Él ha querido compartir el dolor de toda la humanidad. En su sufrimiento por amor entrevemos una suprema coparticipación en las penas de los niños enfermos y de sus padres. Mi venerado Predecesor Juan Pablo II, que desde la aceptación paciente del sufrimiento ha ofrecido un ejemplo luminoso especialmente en el ocaso de su vida, escribió: “Sobre la cruz está el 'Redentor del hombre', el Varón de dolores, que ha asumido en sí mismo los sufrimientos físicos y morales de los hombres de todos los tiempos, para que en el amor podamos encontrar el sentido salvífico de su dolor y respuestas válidas a todos sus interrogantes” (Salvifici doloris, 31).

Deseo aquí expresar mi aprecio y ánimo a las Organizaciones internacionales y nacionales que se ocupan del cuidado de los niños enfermos, particularmente en los países pobres, y con generosidad y abnegación ofrecen su contribución para asegurarles cuidados adecuados y amorosos. Dirijo al mismo tiempo un urgente llamamiento a los responsables de las naciones para que se potencien leyes y reglamentos a favor de los niños enfermos y de sus familias. Siempre, pero aún más cuando está en juego la vida de los niños, la Iglesia, por su parte, está dispuesta a ofrecer su cordial colaboración en el intento de transformar toda la civilización humana en “civilización del amor” (cfr Salvifici doloris, 30).

Concluyendo, quisiera manifestar mi cercanía espiritual a todos vosotros, queridos hermanos y hermanas, que sufrís cualquier enfermedad. Dirijo un afectuoso saludo a cuantos os asisten: a los obispos, a los sacerdotes, a las personas consagradas, a los agentes sanitarios, a los voluntarios y a todos aquellos que se dedican con amor a cuidar y a aliviar los sufrimientos de quien está luchando con la enfermedad. Un saludo muy especial para vosotros, queridos niños enfermos y sufrientes: el Papa os abraza con afecto paterno junto con vuestros padres y familiares, y os asegura un especial recuerdo en la oración, invitándoos a confiar en la ayuda maternal de la Inmaculada Virgen María, que en la pasada Navidad hemos contemplado una vez más mientras abraza con alegría entre los brazos al Hijo de Dios hecho niño. Al invocar sobre vosotros y sobre todos los enfermos la protección maternal de la Virgen Santa, Salud de los Enfermos, os imparto de corazón a todos una especial Bendición Apostólica.+



AICA - Toda la información puede ser reproducida parcial o totalmente, citando la fuente



“La muerte más dolorosa que un ser humano puede experimentar”

Washington (Estados Unidos), 10 Feb. 09 (AICA)


Manifestación en favor de la vida en Plaza San Pedro

El padre de Terri Schiavo, la mujer estadounidense a la que los médicos suspendieron la alimentación asistida en 2005 después de pasar 15 años en estado vegetativo, envió una carta a Beppino Englaro, padre de Eluana, antes de que ésta falleciera ayer, en la que le advierte que su hija sufrirá deshidratada y desnutrida y le pide que reflexione. “Se parecerá –dice- a un documental sobre los campos de exterminio nazis. No quiero que nadie más muera de esta manera", afirmó.

En la carta, Bob Schindler, el padre de Terri Schiavo, que al contrario del padre de Eluana se opuso desde el principio a la muerte de su hija, describe este modo de morir como "cruel y bárbaro" y critica a los partidarios de la eutanasia que dicen que morir de hambre y sed a una persona con daños cerebrales no causa dolor. “Yo he sido testigo de este tipo de ejecución y le puedo asegurar que es falso", explicó.

Eluana, que fue llamada por muchos la “Terri Schiavo de Italia”, llevaba cuatro días sin alimentación e hidratación y estaba pendiente de que se vote la ddl en el Senado italiano.

Bob Schindler añadió que se trata de la muerte "más dolorosa que un ser humano pueda experimentar. Esta es la razón por la que siempre se lleva a cabo en la más estricta reserva, lejos de testimonios y grabaciones", aseguró.

Por esta razón advirtió a Englaro que, "si usted tiene la intención de hacerle esto a su hija, le aconsejo que se prepare" porque verá "cómo se reduce a piel y huesos, los ojos se le saldrán de las órbitas, los dientes sobresaldrán de un modo anormal y sus pómulos se engrandecerán. No hace falta que le diga más, su hija sufrirá de un modo increíble", concluyó al tiempo que invitaba al padre de Eluana a reflexionar.+



AICA - Toda la información puede ser reproducida parcial o totalmente, citando la fuente

No hay comentarios: